Historia Institucional

La Biblioteca Popular Juan Bautista Alberdi fue creada por un grupo de gente que tenía como premisa propender al mayor grado la cultura intelectual. Según consta en el acta labrada el 24 de abril de 1927, el entonces Director de la Escuela Nacional N° 54 Córdoba, Don Faustino Suárez, convocó a vecinos para la formación de una comisión.

Las reuniones se realizaban en la casa particular del director, hasta que se logró el consenso para que la sede de la biblioteca se ubicara dentro del establecimiento de la escuela, contando para ello con las instalaciones de la misma.

En reuniones posteriores decidieron comprar armarios, contratar a una bibliotecaria, y abonar el sueldo más comisiones por cobranza de cuotas societarias.  La tarea de mantener una comisión no fue fácil, aunque estos parezcan problemas actuales, ya que, en reiteradas oportunidades, la falta de concurrentes a las asambleas determinó que continuaran su meritorio trabajo las mismas personas.

Los pasos siguientes constituyeron la consecución de la protección por parte de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares, la elaboración de un estatuto y de un catálogo.  Los aportes de los diferentes vecinos no tardaron en sumarse: servicio de luz gratis, realización de veladas teatrales, kermeses y festivales, sin otra intención que incrementar el caudal bibliográfico y poco a poco armar el mobiliario propio.

Los aportes económicos provenían en forma directa de la Junta de Fomento en primera instancia, y luego de la Municipalidad de Larroque. Mediante pedidos periódicos, se recibían subsidios de la provincia de Entre Ríos. La obtención de la Personería Jurídica, no fue tarea sencilla. Ha sido un tema recurrente manifiesto en la preocupación de las diferentes comisiones directivas. Prueba de ello se encuentra en los diversos órdenes del día del libro de actas. Finalmente, la aprobación de Personería Jurídica se consiguió el 14 de noviembre de 1995 bajo la Resolución N° 130.

Encontrar un sitio propio constituyó una quimera. La biblioteca, luego de migrar de la escuela nacional 54, pasó por la casa particular del Sr. Ángel Martín, la sala de sesiones de la Junta de Fomento, sala del Club Central cedido por el escribano Garbino y finalmente en tres locales que pertenecen a la Cooperativa de Agua Potable, lugar en que estuvo hasta el cierre por problemas edilicios en el año 2017.

En el año 1946 el Sr. Juan De Zan había donado un terreno para la construcción del edificio de la biblioteca, quedando supeditada dicha transferencia a la obtención de la personería jurídica por parte de la biblioteca. Dicho terreno, hoy pertenece al Correo Argentino y aún permanece sin construcción alguna. Los diferentes cambios de administración y el paso del tiempo, han impedido que el deseo de su benefactor pudiera concretarse, pese a todos los intentos que diferentes intendentes llevaron a cabo por devolverle a la biblioteca el lugar que, quizás, le hubiera pertenecido.

En el año 2010 el Honorable Concejo Deliberante Municipal mediante Resolución N 092/2010 donó a la biblioteca un terreno de 1800 m2 ubicado en la calle Islas Malvinas, entre Natalio Novello y Cuchilla de Montiel.

En 2018 se inicia un denodado esfuerzo por parte de la Comisión Directiva a cargo, proceso que no estuvo exento de diatribas, por lograr la construcción del anhelado edificio propio. Durante este proceso, la biblioteca ocupó un pequeño local en alquiler, ubicado en Pedro David Taffarel 248, último sitio antes de la Casa Propia.

El proyecto de construcción estuvo a cargo del Arquitecto José Gette, quien, además, recibió como parte de pago una fracción del terreno por un valor de setecientos mil pesos. El resto del proyecto se financió con el aporte de la Gobernación de un millón de pesos; la Cooperativa de Agua Potable de trescientos cincuenta mil pesos; la Municipalidad de Larroque de ciento cincuenta mil pesos y la campaña de Socios Benefactores por ciento veintiséis mil ochocientos.

El 27 de julio de 2019 se inauguró la casa propia, en Islas Malvinas 133, lugar definitivo gracias al esfuerzo de un puñado de mujeres que superó la adversidad.

El espíritu de la Biblioteca Popular Juan Bautista Alberdi se renueva en forma permanente en el deseo y el trabajo de las comisiones directivas, que año tras año, pasan por esta institución dejando largas horas de trabajo, preservando la memoria y el patrimonio cultural y adecuándose a los nuevos contextos.